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Fuente: Revista somos

Puedo hacer lo que quiera

El discurso debe ser constructivo mas no destructivo porque, sino, llegaremos, muy pronto, a ver portadas que digan "reggaetón anti feminista"

Piero Curi García

Publicado: 2018-04-29

Como bien dice la frase que se rehúsa a extinguirse: una imagen dice más de mil palabras (y más si lleva un título tan cargado como el de la revista "Somos") en un contexto tan cargado socialmente. Y vaya portada que nos muestra que ha llevado a un debate muy intenso en las redes sociales donde salen opiniones a favor o en contra. Así una portada llevo a muchos a comentar su desagrado ante ello, pero otro sector apoyó la medida y felicitó a la revista por darle este espacio a las mujeres. Pues bien, lo que se pretende ser un mensaje de aliento y acorde a la transcendencia actual resulta ser un mensaje muy ideologizado que contiene dentro de ello mucho libertinaje y odio. 

Esta semana la violencia golpeó muy fuerte la tranquilidad que no vivíamos desde hace tiempo debido a la inestabilidad política-que aún no para. Esta vez fue un caso más de violencia contra la mujer que abrió un debate que perdura desde hace tiempo. Canales de televisión, radios, blogs se remitían a opinar y destacar aspectos a desarrollar para eliminar toda esta barbarie. Entre todas estas opiniones me da gusto saber que, por lo menos, hay un consenso inferido: la violencia debe parar. El problema aparece cuando surgen preguntas de cómo abordar el problema, cómo eliminar la violencia, cuáles son los agentes de cambio, entre otros. 

Surgen muchas posiciones, entonces, entre ellas, la de la revista "Somos" que se posiciona en el lado radical del debate. El artículo empieza con mucho repudio ("Al machismo y la cultura misógina no les ha bastado con quemar a la mujer toda la vida.."). Esto es una constante en toda la lectura porque se encuentran muchos rasgos que intentan llegar al corazón y despertar ese sentimiento de repudio con diferentes ejemplos históricos. Después, logra, satisfactoriamente, relacionar esta lucha femenil con la cultura, específicamente, con el reggaetón y, para ello, utiliza a diversas cantantes del género menciona (cantantes que no sabían el fin del artículo) para legitimizar el discurso muy ideologizado a lo largo de todo el artículo. 

Algunos llaman a esta posición feminismo liberal, feminazis, feminismo liberal, entre otros. Yo no utilizaré ninguno de los nombres con el cual se les presenta porque dejo a los lectores que imaginen algún nombre descabellado que describa perfectamente mi opinión al respecto. 

Como dije al inicio, el artículo pretende ser un mensaje inofensivo que se adecúa a la indignación de muchas mujeres y hombres en contra de la violencia machista. Sin embargo, este mensaje es engañoso. Primero, el sentido del mensaje es engañoso, ya que intenta escabullir en toda la indignación poblacional el mensaje de odio que, irónicamente, critica a lo largo de toda la lectura. Esta retórica pretende posicionar al hombre como enemigo de la mujer y obstáculo para la realización personal de cualquier fémina. Segundo, otra constante a lo largo del discurso es el libertinaje desmesurado. Este se muestra como "acto de superación" que se escabulle en mensajes formato "coaching" que logran calar en el subconsciente del lector y normaliza frases como "hago lo que quiera", "nadie me dice qué hacer ya sea hombre o mujer". Frases que surgen de una pésima interpretación del problema que se han visto naturalizados en protestas escandalosas y morbosas donde hay un cero respeto a la autoridad y a las normas legales que, lamentablemente, quitan credibilidad a esta lucha. Todo esto agregado al presupuesto de inferioridad de las mujeres sobre los hombres no natural, sino adquirida y aceptada que pretenden cambiar más no eliminar. 

Después de todo lo dicho, no me extraña que quizás me estigmaticen de machista- incluso me desacrediten por no ser mujer- pero no puedo- o no podemos- dejar de lado estos pequeños artículos que se presentan como inofensivos, pero que esconden una retórica agresiva y conflictiva. En contraposición, si queremos llegar a erradicar la violencia y el machismo (y la misógina), el discurso debe ser constructivo mas no destructivo porque, sino, llegaremos muy pronto a ver portadas que digan "reggaetón anti feminista".


Escrito por

Piero Curi García

Estudiante de Derecho en la Pontifica Universidad Católica del Perú. Director de Coaliciones Peruanas.


Publicado en

Sin medias verdades

Espacio de opinión política sin ninguna allegada a un lado en especial. A todos les va a caer barro.